viernes, 12 de junio de 2015

Homeostasis

La homeostasis (del griego homos (ὅμος), ‘similar’,1 y stasis (στάσις), ‘estado’, ‘estabilidad’)2 es una propiedad de los organismos vivos que consiste en su capacidad de mantener una condición interna estable compensando los cambios en su entorno mediante el intercambio regulado de materia y energía con el exterior (metabolismo). Se trata de una forma de equilibrio dinámico que se hace posible gracias a una red de sistemas de control realimentados que constituyen los mecanismos de autorregulación de los seres vivos. Ejemplos de homeostasis son la regulación de la temperatura y el balance entre acidez y alcalinidad (pH).
Nuestro cuerpo no es un sistema aislado del medio que lo rodea, y al mismo tiempo, sólo sobrevive bajo ciertas condiciones de temperatura, presión, humedad, etc. Pero el medio en que vivimos no siempre presenta estas condiciones. Es por esto que nuestro cuerpo debe estar preparado para dar respuesta a los distintos cambios que el medio le presenta. Este equilibrio se logra a través del proceso de homeostasis. Por ejemplo, nuestra temperatura debe ser del orden de los 37ºC; por esta razón, cuando hace mucho calor comenzamos a transpirar.
La transpiración es una forma de deshacerse de la energía, o disipar el calor que hemos absorbido desde el medio, de modo que nuestra temperatura permanezca constante. Asimismo, cuando hace mucho frío no transpiramos, sino que tendemos a apretarnos y encogernos, para así disminuir el área de contacto con el aire que nos rodea y de esta forma disipar la menor cantidad de calor posible, conservando nuestra temperatura constante.
Así como con la temperatura, nuestro cuerpo también debe equilibrar la presión externa con la interna del cuerpo. Si esto no sucediese, corremos el riesgo de morir constreñidos o reventados.
Pero esto no sucede espontáneamente; regular la presión de nuestro cuerpo demora cierto tiempo. Por ejemplo, los buzos que bajan a gran profundidad no deben subir a la superficie velozmente. En el agua, la presión aumenta con la profundidad; por esto, si alguien sube muy rápidamente su cuerpo no alcanzará a equilibrar la presión interna con la presión atmosférica, y a lo menos tendrá sangramiento de oídos o nariz, puesto que en este caso la presión interna será mayor que la externa.
Por esta diferencia de presión, también se nos tapan los oídos cuando bajamos un cerro con mucha rapidez, salvo que, esta vez, la presión externa es mayor que la interna.
Fuente. www.wikipedia.com      www.icarito

domingo, 7 de junio de 2015

Las articulaciones

Las Articulaciones

Una articulación es la conjunción entre dos huesos formada por una serie de estructuras mediante las cuales se unen los huesos entre sí.
Segun el grado de unión de los huesos y la amplitud de movimientos de que gozan, permiten distinguir tres tipos de articulaciones:
  • las que no tienen movimiento o “sin-artrosis”
  • las semimóviles o “anfi-artrosis”
  • las móviles o “di -artrosis”
tipos de articulaciones
Todas ellas presentan a considerar:
  • las superficies óseas o articulares, que representan el esqueleto de la articulación;
  • las formaciones interóseas, blandas, intercaladas entre las superficies articulares;
  • las formaciones periféricas, también blandas, que rodean y envuelven a las anteriores
Las sinartrosis son articulaciones sin movilidad donde los huesos estan unidos entre sí por tejido fibroso, o una placa de cartílaginosa.
Las anfiartrosis son articulaciones de movilidad limitada en las que entre las dos superficies articulares se encuentra un tejido fibrocartilaginoso que las une.
Las diartrosis son las articulaciones dotadas de movilidad en las que entre los cuerpos articulares se sitúa una cavidad articular que impide la unión directa entre los huesos que se articulan.
Las articulaciones
Fuente:http://www.lasarticulaciones.com/wp-content

domingo, 3 de mayo de 2015

03/05/2015

vaso sanguíneo

Tipos de vasos sanguíneos

Los vasos sanguíneos se clasifican en tres grupos:
  • Las arterias: son las encargadas de llevar la sangre desde el corazón a los órganos, transportando el oxígeno (excepto en las arterias pulmonares, donde transporta sangre con dióxido de carbono) y los nutrientes. Esta sangre se denomina arterial u oxigenada en la circulación mayor y tiene un color rojo intenso. Las arterias tienen las paredes gruesas y ligeramente elásticas, pues soportan mucha presión. Los músculos de sus paredes, que son del tipo músculo liso (dependientes del sistema nervioso autónomo), les permiten contraerse y dilatarse para controlar la presión arterial y cantidad de sangre que llega a los órganos.
Las vénulas son uno de los cinco tipos de vasos sanguíneos (arterias, arteriolas, capilares, vénulas y venas) a través de las cuales comienza a retornar la sangre hacia el corazón después de haber pasado por los capilares.
Poseen las mismas capas que las venas: la túnica externa o adventicia, la capa media y la íntima o endotelio. Las vénulas son pequeñas venas que conducen la sangre desde los capilares hacia las venas.
  • Las venas: llevan la sangre desde los órganos y los tejidos hasta el corazón y desde este a los pulmones, donde se intercambia el dióxido de carbono (CO2) con el oxígeno del aire inspirado, (excepto en las venas pulmonares, donde se transporta sangre oxigenada). Esta sangre se llama venosa y es de color más oscuro. Poseen válvulas unidireccionales que impiden el retroceso de la sangre. Las venas de la circulación general traen sangre de todas las regiones del cuerpo al atrio derecho del corazón. Incluyen las venas que se vacían en el corazón, las que van a la vena cava superior y a la vena cava inferior.
  • Los capilares: Vasos de paredes muy finas, que comunican las arterias con las venas. Se caracterizan por el intercambio de sustancias entre sangre y tejidos.
Dirección sanguínea: Corazón → Arterias → Capilares → Venas → Corazón.

Estructura

La estructura del sistema cardiovascular es repetitivo y consiste en la disposición concéntrica de tres capas de diferentes variedades de los cuatro tejidos básicos, que son las siguientes:
  • Túnica íntima: es la capa interna, formada por un endotelio, su lámina basal y tejido conectivo subendotelial laxo. Está encargada del contacto con el medio interno.
  • Túnica media: es una capa formada por capas concéntricas de células musculares lisas entre las cuales se interponen cantidades variables de elastina, fibras reticulares y proteoglicanos, que en las arterias está bastante más desarrollada que en las venas, y que prácticamente no existe en los capilares.
  • Túnica adventicia: es la capa más externa, con fibras de colágeno y fibras elásticas. Varía de espesor desde relativamente fino en la mayor parte del sistema arterial hasta bastante grueso en las vénulas y venas, donde representa el principal componente de la pared del vaso. Por la túnica adventicia circulan los propios vasos sanguíneos, llamados vasa vasorum que irrigan a los vasos sanguíneos de gran calibre como la arteria aorta

viernes, 24 de abril de 2015

El corazón

En el ser humano su tamaño es un poco mayor que el puño de su portador. El corazón está dividido en cuatro cámaras o cavidades: dos superiores, llamadas aurícula derecha(atrio derecho) y aurícula izquierda (atrio izquierdo), y dos inferiores, llamadas ventrículo derecho y ventrículo izquierdo. El corazón es un órgano muscular autocontrolado, una bomba aspirante e impelente, formado por dos bombas en paralelo que trabajan al unísono para propulsar la sangre hacia todos los órganos del cuerpo. Las aurículas son cámaras de recepción, que envían la sangre que reciben hacia los ventrículos, que funcionan como cámaras de expulsión. La aurícula derecha recibe sangre poco oxigenada desde:
Sonidos cardiacos normales
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Sonidos cardiacos normales a través de un estetoscopio

La vena cava inferior y la vena cava superior vierten la sangre poco oxigenada en la aurícula derecha. Esta la traspasa al ventrículo derecho a través de la válvula tricúspide, y desde aquí se impulsa hacia los pulmones a través de las arterias pulmonares, separadas del ventrículo derecho por la válvula pulmonar.
Una vez que se oxigena a su paso por los pulmones, la sangre vuelve al corazón izquierdo a través de las venas pulmonares, entrando en la aurícula izquierda. De aquí pasa al ventrículo izquierdo, separado de la aurícula izquierda por la válvula mitral. Desde el ventrículo izquierdo, la sangre es propulsada hacia la arteria aorta a través de la válvula aórtica, para proporcionar oxígeno a todos los tejidos del organismo. Una vez que los diferentes órganos han captado el oxígeno de la sangre arterial, la sangre pobre en oxígeno entra en el sistema venoso y retorna al corazón derecho.
El corazón impulsa la sangre mediante los movimientos de sístole (auricular y ventricular) y diástole.
Se denomina sístole a la contracción del corazón (ya sea de una aurícula o de un ventrículo) para expulsar la sangre hacia los tejidos.
Se denomina diástole a la relajación del corazón para recibir la sangre procedente de los tejidos.
Un ciclo cardíaco está formado por una fase de relajación y llenado ventricular (diástole) seguida de una fase contracción y vaciado ventricular (sístole). Cuando se utiliza un estetoscopio, se pueden distinguir dos ruidos:
  • el primero corresponde a la contracción de los ventrículos con el consecuente cierre de las válvulas auriculoventriculares (mitral y tricúspide);
  • el segundo corresponde a la relajación de los ventrículos con el consecuente retorno de sangre hacia los ventrículos y cierre de la válvula pulmonar y aórtica.

sábado, 4 de abril de 2015

Formas de respiración animal

TIPOS DE SISTEMAS DE RESPIRACIÓN
En los animales se dan distintos sistemas de respiración. Estos sistemas presentan distintos grados de complejidad, dependiendo del tipo de animal, de sus necesidades energéticas y del medio en el que vive.
Los animales diblásticos, como las esponjas, o las medusas, no desarrollan estructura respiratoria alguna, debido a que son animales sencillos, que realizan el intercambio de gases de todas sus células con el medio acuático que las rodea. En animales triblásticos aumenta el número de capas celulares y aumentan los problemas para realizar el intercambio de gases con todas las células del cuerpo. Sin embargo, la mayoría de los gusanos planos son capaces de efectuar el intercambio de gases sin necesidad de un sistema específico de respiración, debido al escaso número de células que componen su cuerpo.
 Fasciola hepatica es un gusano plano.
La mayor parte de los animales están constituidos por un número tan elevado de células que resulta imposible que todas ellas puedan realizar el intercambio gaseoso con el medio que los rodea. Por ello, es necesaria la presencia de un sistema respiratorio que capture el oxígeno suficiente para todas las células del cuerpo, recoja el dióxido de carbono liberado y se expulse fuera del animal.
Los tipos de sistemas respiratorios que podemos encontrar entre los distintos animales son la respiración cutáneabranquial,traqueal y pulmonar.
Fuente:  www.proyecto biosfera

viernes, 27 de marzo de 2015

Fisiología del aparato respiratorio

27/03/2015




La respiración externa o "ventilación" en los humanos. La respiración externa o ventilación comprende las tres siguientes etapas:
1 . Inspiración. En ella los músculos intercostales externos se contraen y suben las costillas y el esternón, y el diafragma desciende. Todo ello aumenta la capacidad de la caja torácica, provocando que los pulmones se dilaten y entre aire rico en O2.
2 . Intercambio de gases. En ella el aire rico en O2 llega hasta los alvéolos pulmonares, las paredes de los cuales son tan finas que permiten el intercambio gaseoso. Como están recubiertos de finos capilares sanguíneos que contienen sangre cargada de CO2 y pobre en O2, el CO2 pasa al interior de los alvéolosy el O2 pasa a la sangre que hay en los capilares sanguíneos.
3 . Espiración. En ella los músculos intercostales externos se relajan y bajan las costillas y el esternón y el diafragma asciende. Todo ello disminuye la capacidad de la caja torácica, provocando que los pulmones se contraigan y, por lo tanto, que salga aire rico en CO2.



Fuente: www.aula.2005.com

viernes, 6 de marzo de 2015

Digestión

6/03/2015

Paso de los alimentos a través del aparato digestivo

Los órganos grandes y huecos del tracto digestivo poseen una capa muscular que permite que sus paredes se muevan. El movimiento de estas paredes puede impulsar los alimentos y los líquidos, y mezclar el contenido dentro de cada órgano. Los alimentos pasan de un órgano a otro mediante un movimiento muscular que se llama peristaltismo. La acción del peristaltismo se parece a la de una ola del mar moviéndose por el músculo. El músculo del órgano se contrae estrechándose y después mueve lentamente la porción contraída hacia la parte inferior del órgano. Estas ondas alternadas de contracciones y relajaciones empujan los alimentos y los líquidos a través de cada órgano.
El primer movimiento muscular importante ocurre cuando ingerimos alimentos o líquidos. Aunque el ingerir es parte de un proceso voluntario, en cuanto empieza se vuelve involuntaria y pasa a estar bajo el control de los nervios.
Los alimentos que acabamos de ingerir pasan al siguiente órgano que es el esófago, que conecta la garganta con el estómago. En la unión del esófago y el estómago hay una válvula en forma de anillo llamada válvula pilórica que cierra el paso entre los dos órganos. Sin embargo, a medida que los alimentos se acercan al anillo cerrado, los músculos que lo rodean se relajan y permiten el paso al estómago.
El estómago debe realizar tres tareas mecánicas. Primero, debe almacenar los alimentos y los líquidos ingeridos. Para ello, el músculo de la parte superior del estómago debe relajarse y aceptar volúmenes grandes de material ingerido. La segunda tarea es mezclar los alimentos, los líquidos y el jugo digestivo producido por el estómago. La acción muscular de la parte inferior del estómago se encarga de esto. La tercera tarea del estómago es vaciar su contenido lentamente en el intestino delgado.
Varios factores afectan el proceso de vaciar el estómago, como el tipo de los alimentos y el grado de actividad muscular del estómago y del intestino delgado. Los carbohidratos, por ejemplo, son los que pasan la menor cantidad de tiempo en el estómago, mientras que las proteínas permanecen más tiempo, y las grasas son las que pasan la mayor cantidad de tiempo. A medida que los alimentos se digieren en el intestino delgado y se disuelven en los jugos del páncreas, el hígado y el intestino, el contenido intestinal se va mezclando y avanzando para facilitar la digestión posterior.
Finalmente, todos los nutrientes digeridos se absorben a través de las paredes intestinales y se transportan a todo el cuerpo. Los productos de desecho de este proceso comprenden partes no digeridas de los alimentos, conocidas como fibra, y células viejas que se han desprendido de la mucosa. Estos materiales son impulsados hacia el colon, donde permanecen hasta que se expulsa la materia fecal durante la deposición.
Fuente: www.nddik.nih.gov

viernes, 16 de enero de 2015

Embarazo: placenta

El bebé está unido a la placenta mediante el cordón umbilical, que es un conducto vascular encargado de llevar la sangre (con desechos y sin oxígeno) desde el bebé hasta la placenta, para que se haga el intercambio necesario con la madre y retornar oxigenada y rica en nutrientes hacia el bebé. El intercambio se da a través de la placenta pero funcionando como una barrera muy efectiva que solo permite el paso de sustancias bien determinadas y sin mezclar la sangre del bebé con la de su madre
La placenta es una estructura de origen fetal, la placenta pertenece al bebé y no a la madre, de hecho, las características genéticas de la placenta son idénticas a la del bebé en formación. 
Origen de la placenta: 
Pocos días después de la fecundación del óvulo se forma una masa celular microscópica que parece una mora (múltiples pelotitas); pocos días después esta mora se separa en su interior en dos masas celulares que darán origen al bebé y a su placenta.  La masa celular placentaria se va alejando del bebé y se adosa fuertemente al útero materno manteniéndose unida al bebé mediante el cordón umbilical. 
Cúal es la estructura de la Placenta: 
La placenta es un órgano que se comporta como un filtro de sangre fetal con múltiples compartimientos que bañados por sangre materna permiten el intercambio entre la circulación materna y la fetal evitando su contacto directo, pero en relación tan cercana e intima que permiten que las sustancias nutritivas y los desechos sean intercambiados sin inconvenientes. 
Funciones de la Placenta:  
Nutrición: como hemos dicho la placenta es un órgano que permite la alimentación ininterrumpida del feto en desarrollo.  
Eliminación de desechos: el feto transfiere a su madre los productos de desecho que se producen por su metabolismo y que no puede eliminar por si solo dado que sus órganos son inmaduros.
Funciones endocrinas: la placenta produce hormonas que permiten la permanencia del embarazo y modifican el metabolismo y las funciones fisiológicas maternas para la subsistencia del bebé en crecimiento.  
Tolerancia inmunológica: la placenta y los profundos cambios inmunológicos que imprime el embarazo sobre la madre permite que el feto no sea atacado por el sistema de defensa de la madre.  La placenta juega un papel fundamental para “esconder” al bebé del sistema inmunológico de la madre.
Protección biológica: la placenta se comporta como un excelente filtro que impide el paso de muchas sustancias, parásitos, virus y bacterias que pudiesen afectar al bebé.  La placenta no es perfecta en este aspecto y desgraciadamente una lista importante de agentes pueden ganar acceso al bebé y causarle daños importantes: alcohol, cigarrillo, fármacos fetotóxicos, rubéola, toxoplasmosis, sífilis, etc. 
Protección física: la placenta, las membranas de la “Bolsa de Aguas” y el líquido amniótico que ellas engloban proporcionan un ambiente cerrado, estéril y de temperatura controlada que mantienen al bebé completamente aislado de los factores físicos que podrían generarle problemas: golpes, cambios bruscos de temperatura, infecciones bacterianas, etc. 
Fuente: www.maternofetal.com

lunes, 5 de enero de 2015

Apoptosis celular

5/01/2015
La apoptosis es una destrucción o muerte celular programada provocada por ella misma, con el fin de autocontrolar su desarrollo y crecimiento, está desencadenada por señales celulares controladas genéticamente. La apoptosis tiene una función muy importante en los organismos, pues hace posible la destrucción de las células dañadas, evitando la aparición de enfermedades como el cáncer, consecuencia de una replicación indiscriminada de una célula dañada.
En contraste con la necrosis, que es una forma de muerte celular resultante de un daño agudo a los tejidos, la apoptosis es un proceso ordenado, que generalmente confiere ventajas al conjunto del organismo durante su ciclo normal de vida. Por ejemplo, la diferenciación de los dedos humanos durante el desarrollo embrionario requiere que las células de las membranas intermedias inicien un proceso apoptótico para que los dedos puedan separarse.
La apoptosis ha sido tema de creciente atención en la biología celular y en el estudio del desarrollo de los organismos, así como en la investigación de enfermedades tales como el cáncer. Así lo demuestra el hecho que el premio Nobel del año 2002 para Fisiología o Medicina fuese otorgado a Sydney Brenner (Gran Bretaña), H. Robert Horvitz (EUA) y John E. Sulston (GB) "por sus descubrimientos concernientes a la regulación genética del desarrollo de órganos y la muerte celular programada" .
Fuente: www.wikipedia.com